Los números impares junto con los que acaban en 13 son los más
solicitados y los más vendidos por las
administraciones de lotería de
la capital granadina
Las calles ya huelen a Navidad con las luces y el ambiente que crean los
primeros compradores en los puestos de Bib-rambla y Puerta Real. Los
villancicos suenan de fondo mientras los viandantes pasean por el
centro, los restaurantes no dan abasto con las cenas de empresa, en las
conversaciones de la gente el tema que más se comenta es qué cenarán en
Nochebuena o qué cotillón es el mejor para Nochevieja. Una atmósfera
previa a las fiestas que recuerda que en pocos días los sueños de unos
pocos afortunados se harán realidad si logran uno de esos ansiados
premios de la
Lotería de Navidad el próximo 22 de diciembre.
Por eso, en estos días, decenas de personas aguardan pacientes,
en largas colas, ante las administraciones de lotería para ver si, por
fin, la suerte llama a su puerta. Con la mirada, y a veces en unos
segundos, escogen ese décimo que puede ser el pasaje que les sirva de
trampolín para conseguir el Premio Gordo o en su lugar un tercer o
cuarto premio porque, "cualquier dinerillo es bueno para tapar
agujeros". Y es que, normalmente, el dinero de la lotería, no se destina
a viajes o a darse caprichos, sino a pagar hipotecas, trampas que se
tienen con el banco o para ayudar a algún hijo o familiar que se
encuentra en paro.
Paqui G.V. tiene 27 años y lleva comprando lotería desde hace
cuatro, cuando se independizó. Ahora está sin trabajo y tiene una niña
recién nacida, así que "una ayudita" le vendría fenomenal. Este año,
como en anteriores, va a comprar un décimo terminado en tres, un número
que por ahora, no le ha dado ninguna alegría, aunque como ella dice, "la
ilusión nunca se pierde. Lo que más me gustaría, si me tocara el dinero
es comprarme una casa porque ahora vivo de alquiler. Así, mi niña
podría tener una habitación con todas sus cosas".
Isabel Roldán tiene 82 años y también es de ideas fijas. Tanto
es así que desde hace más de treinta juega al mismo número: el 12065.
Pero no solo en el sorteo de Navidad, sino todas las semanas. "Compramos
ese número por tradición desde que murió un amigo. Ahora saco una serie
y la reparto entre todos los amigos. A ver si con el dinerillo puedo
estar más desahogada porque no tengo mucha paga. También me gustaría
ayudar a alguno de mis sobrinos que no tienen trabajo".
La crisis se está notando, advierten los loteros, algo que anima
a mucha gente a comprar lotería, pero a diferencia de años anteriores,
"en vez de jugar uno o dos billetes, se juegan uno o dos décimos",
comenta Enrique Requena, el lotero de la administración número 4 de la
calle Príncipe.
Con la llegada del frío, llega la temporada alta de los loteros,
pero llevan vendiendo
números de Navidad desde el mes de julio, "aunque
la gente siempre espera al último momento para comprar. de ahí que en
los últimos días se reactiven las ventas".
Está claro que nadie se quiere quedar sin décimo. Pero, ¿qué
número escoger?. Los loteros lo tienen claro: "todos los número están en
el bombo". De hecho, Requena lo elige "a última hora y casi sin
mirarlo". Aunque hay quien lo tiene clarísimo porque lleva afiliado
desde hace años al mismo y, también quien lo coge al azar. "Los impares
como el 5, el 7 o el 9 son los que mejor se venden y de los pares el 2 y
el 4", declara Requena. Otros lo eligen según "me dé buenas vibraciones
o me atraiga por algo" e incluso el 13 es una terminación que se vende
mucho, lo que denota que la superstición escapa a la suerte.
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